Pieza insustituible, en la cultura festiva de los pueblos de Castilla. Instrumento que siempre acompaña una gaita, en las rondas y pasacalles, en las alboradas y en las bodas, en las procesiones y en los ofertorios.
Protagonista en los bailes, de jotas y roscas, de cintas y paloteos, de las charradas, que son la seña de identidad, tradicional y popular, de nuestro patrimonio etnológico.