Soy muy nervioso, horrorosamente nervioso, siempre lo fui, pero ¿porqué pretendéis que esté loco? La enfermedad ha agudizado mis sentidos, sin destruirlos ni embotarlos. Tenía el oído muy fino; ninguno le igualaba; he escuchado todas las cosas del cielo y de la tierra, y no pocas del infierno.
Edgar Allan Poe
-AI y posterior edición.